domingo, 18 de noviembre de 2012



Los muchos dicen que vive...


Era un simple conductor que se salió del carril de circulación cuando transitaba en su camión de carga pesada por  la carretera escénica Tijuana-Ensenada. Una escena de la que se pueden extraer varias versiones. 
Se supone que el chófer viaja por el carril de baja velocidad con una cantidad inexacta de cajas para empacar. Pueden ser para verduras o frutas. El hombre acelera en la conocida "curva de la muerte" o en "El Mirador", se voltea y en un parpadeo despedaza por lo menos 20 metros del muro de contención. La unidad sale disparada por el aire y mientras atraviesa el recorrido de 200 metros en el declive de un acantilado que termina en la inmediaciones del mar frío y pedregoso. En su recorrido deja una alfombra de cajas de cartón que despidieron la caída de 7 segundos o menos. El resultado es inmediato, un vehículo destrozado y una alfombra de material reciclable tendido en la maleza. 
Los testigos del trágico accidente hacen llamadas de emergencia al número 074 del que de inmediato se tiene respuesta y llegan al mismo lugar en el que, ocho meses antes, un joven del 19 años cayó en su vehículo hasta el precipicio. 
Hasta ese momento los oficiales atendían un rescate. Llegó el personal de Rescate de Caminos y Puentes Federales (Capufe), Policía Federal, Cruz Roja Mexicana y hasta los familiares llegaron a las inmediaciones del acantilado. 
Pasaron las horas y desde abajo las noticias eran desalentadoras, solo veían restos de chatarra de la unidad de carga cuyo fierro comenzaba a enfriarse. Es una historia increíble y poco confiable para la esposa de José Pico de 38 años quien, minutos antes, conducía el camión. 
-.Tenemos que bajar, dijo la esposa a primos y hermanos que, al igual que otras personas consideraban una broma que el cuerpo no estuviera en el lugar del incidente. 
Los familiares del accidentado, y posiblemente del fallecido conductor, tomaron la iniciativa y continuaron con la búsqueda, oscureció, amaneció, el frío arreciaba en la zona en la que la brisa y el agua salada detienen la fertilidad del suelo. 
Pasaron las horas, los rescatistas vuelven y se van antes del anochecer. No hay nada más que restos de material reciclable. 
-.Seguro el chófer se salió del vehículo antes de que éste se descarrilara. Ha de querer cobrar el seguro o huir de un mal rato. Es así como los muchos toman la noticia de un desbarrancado que se encuentra en calidad de desaparecido. 

Uno de los rescatistas con experiencia se arriesga al igual que otros para tratar de localizar el cuerpo del José